sábado, 23 de noviembre de 2019

Ramón

Ramón

 

Cuando de gatos se trata Ramón, es el más especial, habla chillando, chilla casi cantando. Sus ojos son dos pozos profundos que invitan al misterio, al encuentro, a la divagación de eternidades que se enredan por entre sus pupilas. Él, con su cuerpo de gato, y su actitud de pantera, camina las noches como acariciando los rezagos de un luminoso día, se acuesta en la cama, respira profundo y en ese pequeño letargo, mira hacía al más allá, cerrando y abriendo sus ojos, lamiendo la soledad de la oscuridad, por entre sueños lejanos e inciertos, se va.


Por: Luna